Rompen manifestantes sesión en Congreso

Piden intervención de diputados para condenar el decreto presidencial que extingue a la compañía Luz y Fuerza del Centro.

14 / 10 / 2009.-

Un grupo de líderes sociales se manifestó ayer durante la sesión que se celebraba en el Congreso del Estado, con el fin de solicitar a los diputados que emitan un punto de acuerdo que condene el decreto emitido por el presidente Felipe Calderón Hinojosa, a través del cual se pone fin a la empresa estatal Luz y Fuerza del Centro (LyFC).

Jorge Armando Ortiz Rodríguez, dirigente de la Federación de Estudiantes de Nayarit (FEN), y la maestra Rosalina Martínez de la Paz, así como una decena de personas más, se colocaron al frente de la tribuna legislativa y mostraron una manta en la que se leía el rechazo al decreto presidencial.

La presencia de los inconformes provocó que la sesión fuera suspendida por espacio de unos 15 minutos. Los legisladores se mantuvieron en sus lugares, algunos de pie, expectantes ante la invasión a la sala.

Martínez de la Paz reclamó que se trata de una represión del Gobierno Federal contra el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).

Los manifestantes dirigieron un documento al diputado Manuel Narváez Robles, presidente de la Comisión de Gobierno Legislativo, y le solicitaron que la Cámara de Diputados emita un punto de acuerdo que condene el decreto que extingue a la compañía LyFC.

De igual forma, en Palacio de Gobierno hicieron entrega de otro escrito solicitando que el gobernador Ney González Sánchez haga un pronunciamiento de rechazo al citado decreto.

En los documentos se anuncia la creación del Comité Nayarita en Defensa de la Compañía Luz y Fuerza del Centro y de Apoyo al Heroico Sindicato Mexicano de Electricistas.

Rosalina Martínez adelantó que volverán a manifestarse si no hay pronta respuesta a la petición.

Más tarde, al reiniciar la sesión legislativa, Jesús Castañeda Tejeda, diputado local por el PRD, realizó un pronunciamiento en contra de la desaparición de Luz y Fuerza del Centro, así como la agresión de que están siendo objeto sus trabajadores.

Tomado de: El tiempo de Nayarit